Presentación

Este espacio no iba a ser más que un espacio de paridas intercomunicadoras, vamos, paridas que unen. Nuestro primer propósito era el de simplemente, inmortalizar aquellos momentos que nos parecían más especiales y seguir dándonos cuerda para crear más… Ahora se ha convertido en otra cosa.

El pequeño grupo de chicas asustadas que éramos hace unos meses ha evolucionado en un chicle pegajoso capaz de contarse entre sí las mayores barbaridades sin vergüenza, los mayores problemas y pasar los mejores ratos –imposible que un chicle conozca la vergüenza-. Desde el momento en el que la escurridiza chica con piel de fantasma y pelo azabache y la señora guionista se cruzaron por el pasillo y dijeron lo de “¿Sabes dónde está…?” “No, yo es que soy de primero” el mundo –al menos el nuestro- ha dado un giro bastante radical.

Sea por el efecto mariposa de esos pequeños universos que creamos por momentos, o porque es cierto eso de que en la universidad se conocen a los que serán tus mejores amigos, este espacio está dedicado exclusivamente a nosotras, nuestras rayadas, nuestras fiestas, nuestras paridas mentales, nuestros estamentos, convenciones, conversaciones, nuestros decretos ( “No beberé” JÁ! “No fumaré” “JÁ! “Me pondré a estudiar…”) y nuestra filosofía en general. ¿Por qué? Porque esto es bonito, y porque une, aunque es seguro que otras muchas cosas nos unirán aún con el tiempo.

Firmado: La liga de las mujeres extra-ordinarias.